Siguiendo
la estela comenzada con el visionado de La
mujer murciélago de la semana pasada, en esta sesión me he centrado en lo
que parece ser otra adaptación libre de otro emblemático superhéroe de la casa
DC Comics como es Superman. El lugar
de procedencia del film ya es bastante significativo, se trata de de un
producto made in India por lo que ya
trae consigo una serie de características propias de la filmografía de
Bollywood, como es una determinada estética muy marcada, bailes sin venir a
cuento, unos efectos especiales que dejan mucho que desear y unos toques
cómicos para amenizar el producto. Aún así, es interesante ver cómo trasladan
un producto puramente estadounidense y ambientado en la ciudad de Nueva York a
un cultura totalmente ajena y a otra megalópolis como es Bombay.
Muchos
de vosotros series incapaces de verla, lo que puede ser comprensible, y la
tachareis de engendro fílmico sin pies ni cabeza, mientras que otros no podréis
parar de reír ante tal producción.
La
película toma como modelo el Superman
de 1978 de Richard Donner, donde Christopher
Reeve encarnaba el papel principal de Clark Kent/Superman, Marlon Brando hacia
del verdadero padre del planeta Kriptón Jor-el y Gene Hackman como el malvado Lex
Luthor pero variando una series de premisas fundamentales como son: la
identidad de Superman aquí se esconde bajo el nombre de Shekhar y está
interpretado por Puneet Issar (un total desconocido para nosotros), mientras
que el verdadero padre es interpretado por Dharmendra, por lo visto, uno de los
actores más importantes e influyentes de la cinematografía india, (algo así
como el Marlon Brandon de Bollywood) y el villano, Verma, corre a cargo de Shakti
Kapoor que es reconocido como uno de los principales villanos de las películas
de Bollywood durante más de tres décadas.
Dejando
a un lado las interpretaciones, tan distantes entre sí y a la vez tan parecidas
en esencia, la historia tampoco es nada novedosa, todos sabemos que desde una
galaxia remota fue enviado un recién nacido por la inminente destrucción del planeta donde vivía, Kriptón y que esté fue
adoptado por una familia de granjeros, cambiémoslo, en este caso, por una
familia normal y corriente de la India, que le
inculcan una serie de valores humanos, entre los que se encuentra el
altruismo. Desde su infancia el niño parece poseer una serie de poderes o
capacidades que lo diferencian del resto, es capaz de doblar una goma, con solo
dos años, cuando su padre está regando el jardín, con unos seis es capaz de
levantar un vehículo para que los padres puedan cambiar una rueda, o tal vez lo
más significativo, hacer breakbeat
con el tema Beat It de Michael Jackson sonando de fondo, (estas son las
extrañas cosas que te hacen plantearte qué demonios estás viendo), a lo que se
le suma correr a la misma velocidad que un tren o pelear sin tener oponente que
le gane.
Por
otro lado, Lois Laine es aquí Gita, el
amor adolescente de Shekhar, una de las reporteras del periódico Daily Times de Bombay, ciudad a la que
va nuestra superhéroe para buscarla y trabajar con ella. En ese mismo periódico
hay un personaje que, en un primer momento parece ser el director del mismo,
pero que más tarde se descubrirá que es simplemente un trabajador más. Este
personaje es un conocido cómico que es capaz de poner mil caras, a cual más
desencajada, y que incluso llega a suplantar la figura del superhéroe en un
intento de sacar una vis cómica del asunto.
Lo
único extraño es que se entrecruzan una serie de argumentos, como el malvado
equipo de cheerleaders que trabajan
para Verma que nunca llega a toparse con Superman, o los planes de acabar con
el planeta a través de una poderosa máquina, similar a una mesa de mezclas, con
una serie de momentos baile cuando los
malvados están reunidos, que hacen del conjunto una mezcla explosiva, ridícula
y exótica.
Merece
la pena ver cómo se ha reconstruido la ciudad de Kriptón, a la par que la
Fortaleza de la Soledad, sin olvidar el traje del superhéroe o la copia mala de
los efectos especiales de la película, sin dejar atrás las escenas de lucha, si
es que a eso se le puede llamar escena.
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