sábado, 10 de diciembre de 2011

Spain is pain #8: Hieratismo pop.


Odio y amo por partes iguales el universo de Moderna de Pueblo en cualquiera de sus vertientes. Creo que lo peor de este cómic es ver lo alargada que es la sombra de Jordi Labanda, y es que la creación de Raquel Córcoles y Marta Rabadán bebe directamente del trabajo del ilustrador catalán denotando un gusto por el estatismo de la imagen anclada por el texto.
No creo que el trabajo de Labanda sea malo, de hecho en el ámbito de la ilustración es donde muestra lo mejor de su arte que, sin embargo, cojea cuando se dirige a lo narrativo. Entiendo el cómic como una convergencia entre texto e ilustración, las cuales se conjugan a diferentes niveles dependiendo del autor, aunque también me gusta que siendo el cómic un arte visual predomine la imagen sobre el texto pero que no camine de manera independiente al texto. Es en ese aspecto en el que creo que Moderna de pueblo no funciona como cómic y si como ilustraciones con texto en un sentido arcaico y poco dinámico. De manera que las imágenes están excesivamente ancladas al texto y sin este no son legibles por sí mismas y carecen de personalidad propia.
Por otro lado uno de los aspectos que más me gusta del trabajo de estas autoras es el aspecto contextual de esta obra que te obliga a estar, como lector, dentro o fuera (o como dirían los amigos de la protagonista in o out) de la misma, los chistes son excesivamente privados tanto generacionalmente como culturalmente. Esta obra del lector un esfuerzo doble el: el de intentar leer el cómic en sí mismo así como estar a la última tanto en redes sociales, como en cultura contemporánea (que no popular). Este aspecto es el que hace de este trabajo algo limitado y con pocas ganas de abrirse a un amplio sector de lectores, lo cual lastra su presencia en revistas como El Jueves y Cuore. Sobre todo en la primera con un público muy orientado y mayoritariamente masculino. Ese es otro de los aspectos que hace del trabajo de R. Córcoles y M. Rabadán se encuentre un tanto desubicado en el panorama nacional del cómic, y es que nuestra Moderna es un cómic, que al menos en un principio, hecho por y para mujeres, con un sentido del humor mucho más blanco del que estamos acostumbrados.
A pesar de todos los aspectos negativos de Moderna de Pueblo considero que es una obra fundamental para entender la historieta de hoy día, cada vez más enfocada a nichos de lectores cada vez más reducidos y con necesidades más concretas que el lector mainstream. Por otro lado se trata de una obra que, por lo contextual de la misma se convertirá en imprescindible para entender el momento actual (aunque no sé si se trata de algo positivo ya que se dice lo mismo de las películas de Esteso y Pajares con respecto a la década de los 80).

                                                                                                                                          @Mr_Miquelpg

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