El sótano del primo Barto: la odisea del creador de horror

Esta semana continuamos nuestra pequeña parada en la obra Solo de Garrido Barroso, sí la semana pasada realizábamos una pequeña crítica de su cómic de zombies sin zombies, ahora le toca a el autor tomar el turno de palabra. Garrido Barroso nos habla sobre el terror, pero también nos comenta otros temas igual de interesantes como las influencias en su trabajo o la aventura de la autoedición.

El terror como tema

Bueno, nunca he reparado en su importancia, pero es evidente que de alguna forma u otra el terror siempre está presente, supongo que es por varias razones, la primera es que mis primeras influencias narrativas fueron las pelis de terror, soy uno de los niños que se criaron viendo Alucine los fines de semana en tve2. Por otra parte, mis historias suelen estar siempre rodeadas de un aire de tensión velada e intriga muy propio de algunas obras de terror, yo diría que la importancia del terror en mis cómics viene más dada por la atmósfera de “irrealidad” con la que intento envolver historias y situaciones que, en realidad, son realistas.

Zombies sin zombies

¿Por qué leche sin leche? ¿Por qué pantalones que parecen rotos pero no lo están? ¿Por qué hembras humanas sin mi cariño? No sé, supongo que lo más importante para mi es contar algo sin contarlo y en mi historia en concreto, para hacerlo un poco más evidente, decidí quitar los zombis de la ecuación porque eran el elemento más espectacular de la historia. No es que no me gusten los zombis como personajes de ficción, todo lo contrario, creo que es uno de los seres de ficción más potentes creados por el hombre, para mí significan el “otro”, más horrible de uno mismo. Lo zombis en mi cómic, en cambio, son una excusa para que el exterior sea inviable.

Influencias en tu trabajo

Bueno, en cuanto a narración mis influencias en cómic son muchas, pero principalmente son narradores muy pausados, a veces hasta estáticos, como Chris Ware, Jason o Jiro Taniguchi. Por otro lado, en cuanto a guion e historias se refiere siempre me vi influido por Clowes o Anders Nilsen, y actualmente por escritores como Chuck Palahniuk y por literatura de ciencia ficción. Que cool parezco para estar todo el día en chándal y vivir en un ghetto ¿No?

El camino de la autoedición

Para este cómic use un proceso de financiación llamado Crowfounding, el sistema es muy básico en realidad, tu presentas tu proyecto al público y este decide financiarlo o no y la cantidad que ofrece. El inversor a cambio recibe algo, en mi caso era un dibujo o un ejemplar firmado. Los pros son que tú decides al 100% qué públicas y cómo, además de que es el lector directamente quien decide si tu cómic les gusta. ¿Los contras? Buff... Creo que de las primeras cosas de las que me acusaron fue de estafador o, como me decía un amigo, “ciber- pedigüeño”. El sistema funciona, pero para emprendedores y principiantes, como fue mi caso, no es algo fácil, se tienen que tener en cuenta muchos puntos y surgen muchas dudas que en realidad nadie puede contestarte, porque aparte de hacer las veces de autor, debes hacer las de editor, distribuidor, etc. Lo ideal sería publicar a través de una editorial, pero tal y como está poniéndose el patio, para proyectos concretos y personales creo que es el sistema perfecto.

El futuro

Prepararme para sobrevivir al fin del mundo o producirlo yo mismo. Creo que mi futuro en el cómic es seguir con esto último por ahora, auto publicarme un cómic o dos más, me parece una buena carta de presentación para una editorial, además dice mucho del cariño que tengo por este medio y eso creo que también se valora. Mientras, lo que intento es abarcar el máximo posible de colaboraciones con fanzines y otras publicaciones, pagadas o, como es el caso hasta ahora, no.