Confesiones sobre los cómics de Buffy.
La serie de Buffy Cazavampiros ha tenido sus propias historias paralelas a la serie en versión cómics. Aquí juega mucho qué considerar canon y qué no. Dividamos los números en pre finale y post finale.
Los cómics pertenecientes a la pre finale me encantaban, guardaban el mismo espíritu de la serie y no había nada que desencaraja en la trama o vida de los personajes. Además a veces desarrollaban números especiales a personajes secundarios como Giles (mi favorito) u Oz. Sin duda uno de los mejores fue el de Tales of the slayers que narra la historia de varias cazadoras de vampiros a través del tiempo y la de Tales of the vampires que hace lo mismo con los vampiros y que sorprende incluyendo a un personaje que descubrimos es la abuela de Rupert Giles.
Sin embargo, con los cómics post finale, es decir la octava temporada en adelante, tengo sentimientos encontrados. Aprovechando las posibilidades que da trasladar una historia al cómic donde ya no existe el presupuesto de producción, digamos que los guionistas pecaron en exceso. Buffy y su equipo ya no era la Scooby Gang, eran Los Vengadores. No hacía falta, Whedon si ya tenías tus propios Vengadores, no nos quites a los Scooby.
La gracia de Buffy era ver con un grupo de chicos de lo más normales acababan con seres terroríficos, pero a partir del final de la serie y en los cómics la cosa cambió. Willow es casi una diosa y Xander es Nick Furia (Si tiene hasta parche). Los elementos que podrían ser aceptados en cualquier otra historia, aquí chocan porque ¿en serio os imagináis a una Dawn gigante en Buffy?. Por lo menos, en mi caso, yo quería seguir viendo la serie en formato cómic y estos números no me lo dieron.
Pero claro, como fan incondicional de Buffy no podía perderme saber qué le esperaba a mis personajes favoritos (ya digo que nada bueno) y por ello seguí, sigo y seguiré con los cómics.
Para terminar os dejo con un fragmento del motion comic que hicieron de la temporada
No hay comentarios:
Publicar un comentario