domingo, 23 de octubre de 2011

Quiero ser como J.J.Jameson! Hoy "¿Por qué odio Spawn?"

La entrada de hoy será corta; cosas de los editores que nos retiramos a un búnker secreto donde ningún trepamuros pueda encontrarnos... Ejem!

Bien, mi título iba a ser diferente ("¿Por qué creo que 'Spawn' es una mierda"?), pero decidí que la palabra 'mierda' quedaba soez y que 'odio', sin embargo, definía mucho mejor mi sentimiento.

Haciendo un poco de historia, mientras la visionaria Karen Berger sentaba en el 90-91 las bases de un sub-universo diegético dentro de DC Comics llamado VERTIGO (del que ya nos habló, y hablará, el Primo Barto en su sótano) con la filosofía de coger a grandes guionistas (la mayoría de ellos británicos) y unirlos a algunos dibujantes, algunos bastante mediocres, para contar unas historias maravillosas dedicadas al horror, al terror sobrenatural...

Un año más tarde, unos cuantos dibujantes (Todd McFarlane, Erik Larsen, Jim Valentino, Marc Silvestri, Rob Liefeld, Whilce Portacio y Jim Lee) tuvieron la "genial idea" de darle la vuelta al concepto de Karen Berger: un nutrido grupo de dibujantes estrella que huían de Marvel y DC crearían sus respectivos sellos editoriales unidos bajo una marca común, eso sí, con mediocres (cuando menos) guionistas como partenaires. Había nacido IMAGE Comics.

Evidentemente, IMAGE, no era en esos tiempos la casa de The Walking Dead o Invincible que hoy conocemos; en 1992 y el resto de la década, la editorial tenía como estandarte un personaje propiedad de MacFarlane: Spawn. El tipo, en cuestión, era un bicho resultante de sacar a un humano del infierno con una capa a lo Batman, unas cadenas a los Ghost Rider y un traje de mallas que recordaba demasiado al "black Spidey" y el enemigo que MacFarlane creó para éste (y que intentó llevarse y no consiguió): Venom.

Así que tenemos un personaje si carisma que para atraer se basa en un dibujante molón que copia los atributos de algunos superheroes chachis y hace un batiburrillo para contar unas historias que son una autentica porquería.

Y me diréis: "hay buenas historias de Spawn". Cierto, la mejor de ella es de Alan Moore y encima no la protagoniza Spawn, sino su enemigo Violator.

También podréis decirme: "pero hay personajes guays". Cierto también, algunos de los cuales (Angella, Medieval Spawn, Cogliostro) son creación, no del efectista dibujante, sino de una de las estrellas de Vertigo, Neil Gaiman, creador de The Sandman, y que luego entro en juicio con MacFarle por temas de autoría de personajes que otro día hablaré...
La mayoría de lectores y aficionados que dicen "me gusta Spawn" (curiosamente con más orgullo que cuando tratan del pobre Superman, como comentaba Iván Sarnago) son gente que tuvo a Spawn en sus manos a la tierna edad de 12-16 años y relacionan esta etapa de su vida con el engendro infernal...
Podría seguir dando razones o, simplemente, poner a Spawn de grana y oro, pero prefiero leer las reacciones de los que lean esto.

Además, ¿cómo no odiados si su sastre parece ser el mismo que el de ese maldito sinvergüenza de Spiderman?

10 comentarios:

  1. Que voy a decirte que no hayamos discutido ya... a mí me gusta Spawn. Reconozco que como cómic, es un monstruo de Frankenstein en toda regla: más experimento que argumento (sólo hay que ver los asesinatos a la continuidad que hay cada fin de saga), más pastiche que personaje. Hoy día no saldría a la luz si alguien fuese capaz de llevar la propuesta a Image, pero no me negarás que es el personaje noventero por excelencia: Spawn es la serie B de los cómics (con permiso de nuestro compañero Iván Sarnago).

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  2. Yo lo veo como el Rob Liefeld del interior de los comics

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  3. Hombre, Spawn no es canela en rama, eso es cierto, pero tampoco es tan malo. Yo tengo el problema que solo leía cómic español y europeo, principalmente clásicos, hasta los 18, por lo que todo el movimiento noventero a lo bestia lo pille después y no lo entendía demasiado, yo que siempre he sido, y soy, un enamorado de la línea clara. Gracias Dios por Mike Allred. Pero vamos, que coincido con la explicación del señor Tenorio, es la serie B de los cómics, y como tal es altamente disfrutable si se va a lo que se va. a tope.

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  4. Anda que no se han gestado cómics malos en las dos grandes, y personajes "refrito". Masacre sin ir más lejos (cierto, también culpa del amigo de McFarlane).

    Pero con tu columna no das demasiado pie al debate, es tu opinión y te la llevas durante el texto. Para gustos...

    Spawn brilló junto a Savage dragon por encima de todas las demás creaciones, y no olvides el público al que sí van dirigidos siempre los cómics: ese mismo que has mencionado. Por tanto, Spawn nació con defectos y amalgamas, pero no muchos más defectos que los cómics Marvel cuando salieron al mercado. Eso sí, rápidamente encontró mejores rumbos, y tiene toda una etapa intermedia entre los 100 primeros números que lo demuestra, incluso spin-offs que han sabido ser mejores que la obra madre, aunque precisamente cuando salió la colección de Sam & Twitch, la serie de Spawn era de lo mejorcito del mercado, por mucho Vértigo pedante que hubiera al lado, porque, a ver si lo decimos de una vez, Vértigo tenía 2 o 3 grandes series pero también mucha basura, escrita, eso sí, por intocables de renombre.

    Spawn no buscaba el mismo público que Vértigo, es injusta la comparación aunque nacieran en los 90 ambas (que tampoco exactamente, Vértigo se originó gracias a obras grandísimas dentro del sello DC que se gestaron desde 1986 en adelante, y después se aunó a algunos de esos autores bajo ese sello), ni es justo decir, aunque los resultados fueran más o menos esos, que se juntaron un par de dibujantes para añadir guiones mediocres a páginas muy espectaculares. Spawn y Savage Dragon siguen hoy ahí, y eso es síntoma de algo. Dependía todo del ego de cada creador, y algunos, unos por lo creativo y otros por el márketing, supieron muy bien lo que hacían. Portaccios, Silvestris y demás, a los 3 días a la mierda, pero era evidente, sigue sucediéndoles y esos sí que no son nadie absolutamente, y comienzan una serie y la dejan antes de finalizar las 20 páginas del primer número.

    McFarlane, puede ser demonizado de manera sencilla por aquello de Neil Gaiman y demás, pero siempre ha demostrado que tenía mente de empresario. Y para sobrevivir en el mundo del cómic, hay que serlo, te lo aseguro. A la vez que los primeros números de Spawn, ya se estaban haciendo algunos de los mejores muñecos de la industria de sus propios personajes (con el dinero conseguido de sus ventas en la serie propia que pidió hacer de Spider-Man), ya preparaba merchandising a niveles que nadie más lo había hecho (calidad), y después volvió a sentarse para afinar la historia y guiones de su criatura, ya acompañado. Se le representa como un Divo malicioso que mira por la pasta, pero él sabía ya en los 90 que hoy en día, el cómic de un personaje se mantendria vivo para acompañar las ventas del merchandising, que es de donde nos llevamos algo, y no al revés.

    Y por el lado ya exclusivamente de calidad y guiones y demás, ahí tenemos a Erik Larsen, inasequible al desaliento haciendo el sólo su Savage Dragon, una lectura estupenda, un cómic sin el cual no estaríamos leyendo hoy Invencible, pues también Savage Dragon contenía una dosis altísima de amalgama, homenaje y crítica burlesca del cómic de Marvel y DC de los últimos años.

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  5. Toda una defensa, sí, señor. Un buen ejemplo de esos spin-offs de calidad son 'Curse of the Spawn' (donde ya se veia el potencial de tener a Sam&Twitch de protagonistas) y 'Spawn the Undead'. También incluiría la colección 'HellSpawn', ilustrada por Ashley Wood y que no hubo manera de que Planeta lo publicara...

    Un punto que sí me parece indiscutible es que McFarlane Toys hizo (y sigue haciendo) unas figuras tremendas. El señor McFarlane tiene una visión muy clara de lo que quiere hacer con SU personaje y la marca que creó.

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  6. Joer, para no dar pie al debate anda que no...
    Jajaja!
    Al contrario, creo que tocar sensibilidades es lo mejor que hay para charlar.
    Eso sí, pido perdón por estar fuera de mi lugar de trabajo y tener q responder con el puyo movil...
    A ver si este domingo hablo de algo sexual!

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  7. Bueno, F, ¿por qué odias Spawn?
    Has referido su "casta bastarda", pero no por qué te desagrada.
    "Portaccios, Silvestris y demás, a los 3 días a la mierda, pero era evidente, sigue sucediéndoles y esos sí que no son nadie absolutamente, y comienzan una serie y la dejan antes de finalizar las 20 páginas del primer número." Esta observación es buenísima. ¿Sabéis quién tiene la culpa de que esto pase?
    Primero, los lectores, que babean con cuatro viñetas espectaculares. Luego, los pintamonas de los que suelen comentar/llevar el correo, que a un golpe de látigo editorial, te los encomian.
    Les tengo tela de hambre, a los Abraham García y j. Clemente, y algún día, habrá reseña donde todo será FUEGO INFERNAL y Tiroteo Mundial en Nivel MAX. Hay que ponerles en su sitio: estamos trasegando las mierdas de sus tebeos favoritos que, precisamente, NO SON los que les gustan al personal.

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  8. Ves, al final Spawn acaba provocando el fuego infernal (ya lo sé, es un chiste muy malo).
    Ganas de leerte, Antonio.

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  9. Profesor Loki, Átomos, gente divertida a veces... Pero también mucho "correero" nemedio gilipollas es lo que abundaba en los 90...

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  10. Hombre, creo que promocionar o promover ciertas cosas, estaría en su sueldo.

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