miércoles, 6 de junio de 2012

Spain is Pain #43: Las entrevistas del Saló: David Sánchez (1/2)


Entrevistamos a David Sánchez, autor de Tu me has matado y No cambies nunca, el sábado día 4 de mayo a medía tarde en uno de los días más intensos del Salón. Esta entrevista se publicará en dos partes.

Miguel Pérez.- Contigo voy a empezar la entrevista una manera un poco diferente al resto. Me gustaría hablar de influencias: primero de las de carácter audiovisual y luego de las del cómic. Porque una cosa que tienen tus historias es que podrían pasar perfectamente al cine.

David Sánchez.-  Si, la verdad es que Tu me has matado es muy cinematográfico, eso esta hecho a posta, sucede en la américa de las películas. En esa América que se ha convertido en un lugar común y de ficción que conocemos todos por que lo hemos visto en mil películas. Las influencias cinematográficas de Tu me has matado van desde Tarantino de David Lynch, se ha hablado mucho de esto, quizás el rollo Lynch es algo más inconsciente lo llevo interiorizado desde que era pequeño y me sale de manera inconsciente. Lo que yo si que quería cuando hice este tebeo era que transcurriera en los desiertos de las películas de Russ Meyer ese color del  technicolor de Supervixens, que es una película que me encanta, pues quería situar la acción ahí, en esos desiertos con gasolineras. En cuanto a influencias gráficas del mundo del tebeo, yo de pequeño empecé a leer Tintin y es algo que se me ha quedado ahí, creo que tengo mucha influencia interiorizada que a lo mejor no se nota a priori pero yo de pequeño copiaba a Moebius, sé que hoy en día no se me nota, quizás se me nota más Burns o Clowes o cosas así.

M.P.- En cuanto a referencias audiovisuales yo añadiría Aki Kaurismaki, por lo hierático de los personajes y por los diálogos cortos y contenidos.

D.S.- Pues lo siento pero no he visto ninguna película de este director (risas), se quien es de oídas pero no he visto ninguna.

M.P.- En tus trabajos me da la sensación que hay una lucha entre la definición que haces tu de la realidad con la que quieren crear tus personajes.

D.S.- La verdad es que no sé que decirte, yo cuando hago un tebeo no tengo una intencionalidad casi en nada. Yo empiezo, de hecho ni siquiera escribo un guion, parto de una pequeña idea y voy tirando a ver hacia donde va tirando la historia. Incluso la historia, de una manera extraña incluso ajena a mi, acaba siendo la historia que toma las riendas. Por ejemplo el tebeo que he hecho ahora, No cambies nunca, iba a ser en el espacio.

M.P.- De hecho hay un pequeño guiño con una película que están viendo los personajes ¿no?

D.S.- Esas páginas me gustaban mucho y al final decidí meterlas. Pero es que el tebeo iba a ser una cosa muy distinta cuando empecé, pero la historia avanza sola y de repente te das cuenta de que la historia va por otro lado y que ese es el interesante. A mi me gusta mucho meterme ahí y establecer una especie de trance, te metes ahí y la cosa sale sola de un sitio extraño.

M.P.- Entonces estamos diciendo que intencionalidad no hay, trabajas sin guion previo…

D.S.- Si tú coges mis tebeos las siete primeras páginas son la idea inicial. En el caso de Tu me has matado que quería demostrarme a mi mismo que era capaz de hacer un tebeo y de hacer algo interesante. Quizás por esto sucede en un universo común, porque era la manera de camuflarme al principio, y en el caso de No cambies nunca tenía un par de premisas que me apetecía desarrollar que era: la transformación, que casi todos los personajes del tebeo tenían que sufrir una transformación de cualquier tipo, y las relaciones de pareja, si te fijas todos los grupos de personajes que aparecen son parejas.

M.P.- De manera que podemos decir que la mutación es un catalizador de la pareja, ya sea para bien o para mal. Por ejemplo el caso del doctor que se convierte en mujer para criar un mutante, el personaje que se somete al tratamiento por tener una relación interpersonal.

D.S.- Si, pero no lo hago de una manera intencional.

M.P.- Entonces que hay de intencional en tus cómics.

D.S.- Poca cosa.

M.P.-  Y que me dices del color.

D.S.- Tampoco me plantee: “esto va a ser en tonos fríos”. Simplemente, si están en un quirófano utilizo el verde quirófano y voy siguiendo la gama, yo lo hago un poco por instinto. Lo que si me gusta provocar en el lector las sensaciones que a mi me gusta tener cuando yo soy lector o espectador, pero tampoco busco unas reacciones concretas, tampoco digo: “si a este tío le pongo tetas y polla voy a provocar esto”… no. Va todo por instinto, yo no soy un tipo racional, no se racionalizar bien las cosas, soy de otra manera.

M.P.- O sea que programación de tiempo no haces.

D.S.-  No, yo soy un completo desastre, trabajo cuando puedo.

M.P.- Así que no trabajas con fechas.

D.S.- En este caso si. Mi editora volvió de baja de maternidad y me dijo que si quería tener el tebeo para el salón me lo tienes que entregar en febrero. Y he hecho lo mismo que he tardado año y medio en hacer, en cuatro meses. Lo he coloreado en tres días, no había trabajado tanto en mi vida, ha sido bastante estresante.

M.P.- Hay dos aspectos que me llaman mucho la atención de tu trabajo. Uno es el de la representación geográfica, del que ya me has hablado, y el otro es el de la escasez emocional de los personajes que se transmite por los diálogos cortos y la ausencia de monólogos.

D.S.- El rollo tenia que ser un poco frio, eso estaba ahí desde el principio, pero a la vez si que creo que hay mucha emocionalidad se nota como un personaje esta enamorado de otro, como el tío quiere mucho al bebe aunque este le ha trastornado, creo que eso se nota de otra manera, aunque todo sea muy frio y la manera de relacionarse sea también fría. 

(Mañana continuamos con la segunda parte de la entrevista a David Sánchez)

                                                                                                                                          @Mr_Miquelpg

2 comentarios:

  1. Off topic: Un saludo Miguel, desde la fría mesa de la campaña de Renta. Un placer hablar de comics rodeados de borradores de Hacienda

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  2. Hola. La verdad es que la situación era curiosa. Un saludo.

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